12.5.06
34.

La verdad que me aburre. Todo muy lindo, muy grande, impresionante... Yo qué sé... Si hay algo que tengo en el debe, es cultura oriental, más precisamente china. De Japón y sus samurai, sus ronin, su Imperio del Sol Naciente, Karate, ninjas y geishas, sushi, sake y sudoku, guerras, harakiris y kamikases, Nintendo, Sony y Toyota, el tren bala y el Monte Fují (que no lo pude ver!) estoy más o menos cubierto. Pero de China. Siento una gran verguenza. Más hacia su pasado. Lo reciente está incorporado más por ósmosis y actualidad que por interés, debo admitir. Mao y la Revolución. Comunismo y amenaza y el miedo de Mafalda de que salten todos a la vez y el mundo salga de órbita o de que uno solo aprete un botón y sea el último suspiro de el resto. Sí, Marco Polo estuvo por acá y se llevó los spaghetti. Gengis Khan cabalgó una y otra vez. Confucio y la dinastía Ming lideraron a millones, cada uno a su manera. Y hasta ahí llego. Su milenario y difisilísimo idioma complican mucho más las cosas. El japonés al menos me parece más simpático al oirlo, pero el chino casi que me desagrada. Y lo peor es que tampoco me llama mucho la atención. Siento que debería aprender un poco más por obligación. Pero acá, sentado en esta muralla, LA muralla, por la que tanta gente murió, ya sea construyéndola o intentando cruzarla, miro para todos lados y todo me parece gigante. Así como los colores tienen nombres como azul cielo, o rojo sangre, debería haber un adjetivo que sea "gigante chino", para explicar de una sola palabra lo que representa este país. Sé que habrá cientos, miles de cosas interesantes por ver, escuchar o sentir. Pero ahora, en este momento, en el medio del infinito y con millones de ladrillos grises que separan nada más que un mar de arboles, colinas a la distancia y muchas rocas más lejos aún, me pregunto qué hago acá. Tengo frío. Y me quiero ir.

Y encima Raf que escucha a los Enanitos Verdes... ¿Cuándo sale el primer tren hacia algún lado?

roy.

1 comentarios:

ezaricos dijo...

Volvete a Japón o andate a Hong Kong. Jajaja. Entre el hablado chino y Los Enanitos Verdes, severo dolor de oído.